Irlanda 31 Gales 7. En un Aviva Stadium a reventar, Irlanda con un grupo envidia de casi todos los equipos del rugby mundial se enfrentaba a una Gales que iba a tener dificultades para sacar algo positivo. Los del dragón lo hicieron admirablemente al principio, pero seis penales en los primeros 20 minutos siempre se traducirían en puntos irlandeses. El primero llegaba de la bota de Crowley después de un disparo alto de Tompkins. La segunda con Sheehan saliendo desde la parte trasera de un maul rodante que giró perfectamente hacia el campo para que el hooker registrara su cuarto try del campeonato. Si Gales había concedido la menor cantidad de penales entre todos los equipos en las dos primeras rondas, aquí su indisciplina rápidamente se convertía en un grave problema. Después de otra ola de presión irlandesa, con Gales aguantando lo que podía y defendiendo su propia línea de try de una serie de ataques cortos de Irlanda, al final no conseguían detener a los anfitriones, llegando la tercera con Lowe posando después de un pase de Nash. Crowley agregaba las conversiones para darle a Irlanda una ventaja de 17-0 , llegando con ese marcador al descanso después de que la primera entrada de Gales en el 22 irlandés no sirviera para nada.
La ilusionante segunda parte de Gales ante Escocia parecía repetirse ante Irlanda con un inicio que prometía y que hacía sufrir a los locales. El ensayo de castigo que les concedía el arbitro italiano amaneciendo la segunda mitad, fue el clavo ardiendo al que se agarraron los del Principado para meterse en el partido. Servía para comprobar de nuevo que este es un equipo orgulloso también en la adversidad, pero sobre todo que Irlanda es tan impenitente detrás como delante. No tolerando un solo punto galés a partir de ese accidente, ni siquiera en un tramo final en el que apretaron con ahínco los visitantes, especialmente en un drive con más de una decena de fases en el que fiaron todo al pick and go y acabaron comiéndose un balón injugable cuando parecía que Wainwright había posado. En cambio Irlanda volvió a exhibir su arsenal completo. Primero el cualitativo, con ese maul que es un arma de precisión y que ha sentado a Sheehan a la mesa de los mejores primeras líneas del momento; después, el cuantitativo, esas acometidas de su línea para explotar los espacios y las superioridades creadas por el pack, esta vez con Lowe como finalizador de una ofensiva en la que el Puerro exhibió un compromiso inquebrantable en el placaje para aun así acabar cediendo ante la variedad de registros de los hombres de verde, que igual pueden bailarte un tango que alicatarte un baño. Gales reaccionaba tarde en busca de un segundo intento pero el sustituto Ryan, lo impedía ilegalmente, por no respetar los diez metros de distancia en un golpe de castigo, recibiendo tarjeta amarilla a poco del final. Así, era Irlanda quien tenía la última palabra, con Beirne culminando una gran tarde personal con un try, atravesando una brecha para asegurar el punto de bonificación ya con el tiempo cumplido.
Sólo Inglaterra y Escocia decidirán ahora entre los de Andy Farrell y su segundo pleno seguido, un logro inédito en el torneo desde la Inglaterra de principios de los 90, que lo consiguió en 1991 y 1992.
IRLANDA (17+14): Porter, Sheehan, Furlong, McCarthy, Beirne, O'Mahony , Van der Flier, Doris, Gibson-Park, Crowley, Lowe, Aky, Henshaw, Nash y Frawley. También jugaron Kelleher, Healy, Jager, Ryan, Baird, Conan, Murray y McCloskey.
Marcador: 4 ensayos, Sheehan (20'), Lowe (32'), Aki (58') y Beirne (80'), 3 transformaciones Crowley (22', 33' y 81') y un golpe de castigo Crowley (7').
GALES (0+7). Thomas, Dee, Assirati, Jenkins, Beard, Mann, Reffell, Wainwright, Williams, Costelow, Dyer, Tompkins, North, Adams y Winnett. También jugaron Elias, Domachowski, Lewis, Rowlands, Martin, Hardy, Lloyd y Grady.
Marcador: 1 ensayo, de castigo (43').
Arbitro: Andrea Piardi (Italia). Amarilla al irlandés Ryan en el 76'.
Escocia 30 Inglaterra 21. En un Murrayfield hasta los topes, Escocia ganaba la Copa Calcuta a Inglaterra por obra y gracia del ala Van der Merwe, uno de esos ‘hormonados jugadores’ que el rugby últimamente fabrica en serie. Cuarto triunfo consecutivo en el trofeo más antiguo de cuantos alberga bajo su paraguas el Seis Naciones. Lo nunca visto desde 1896, la primera y última vez hasta ahora que el Cardo había hilado cuatro triunfos en la cita, históricamente dominada por su rival (82 triunfos a 48).
Un hat-trick del imponente caledonio, con cuna en Sudáfrica y unas dimensiones (1,93, 106 kilos) que hace no mucho eran excepción (Lomu y pocos más) en su posición, apagó un comienzo abrasivo de la Rosa, esa nueva vuelta de tuerca a su planteamiento que Steve Borthwick había anunciado a bombo y platillo esta semana. Y es cierto que esa etapa iniciada en el Mundial, la de acercarse de nuevo a la excelencia en los básicos, parece superada. Los inventores del juego vuelven a buscar el abierto, la expansión, y pegaron primero a la salida de una melé con una transmisión eléctrica entre Daly y Furbank ayudada, todo hay que decirlo, por las facilidades que ofreció la línea local. El pie de Ford ponía después el parcial en 0-10. Fue el preludio de la exhibición de Van der Merwe, que ya acumula 26 posados en 37 partidos internacionales. Empezaba haciendo bueno un quiebro de Tuipulotu que apoyó Jones (esa conexión Glasgow Warriors) y continuaba con una arrancada atómica pegado a la línea de cal, a punto de pisarla de hecho en varias zancadas, que no encontró oposición. El parcial, con un golpe pasado por Russell, era de 17-0 hasta que George Ford lo interrumpió con un drop marca de la casa.
En la segunda mitad no tardaba mucho el ala escocés en volver a golpear a la defensa inglesa frenando sus aspiraciones. Casi tanto como tardó en reanudarse el juego. Finn Russell, haciendo de ángel y demonio en la misma jugada, rozaba la fatalidad con un error en el juego al pie que por suerte acabó en manos de Redpath, para relanzar la jugada y que el apertura acabara asistiendo a Van der Merwe con una patada cruzada de bote perfecto. Escocia, con una renta tranquilizadora, de más de un ensayo transformado, para no variar su esencia, se dedicaba a procrastinar en vez de intentar remachar. Y así, aprovechando un intervalo inexplicable en su cortina defensiva, Feyi-Waboso anotaba el segundo posado inglés de la tarde. Por suerte para el Cardo, Fin Smith no lo transformaba, evitándoles un final mucho más inquietante (más si cabe con la amarilla a Van der Merwe en los últimos minutos por un placaje peligroso sobre Freeman) del que acabarían afrontando, siendo esala la última vez que el marcador se movía en un Murrayfield entregado, que celebró por partida doble: nueva victoria ante el enemigo histórico y con ella mantener las opciones de su equipo de ganar el torneo por primera vez en este siglo.
ESCOCIA (17+13). Schoeman, Turner, Z. Fagerson, Gilchrist, Cummings, Ritchie, Darge, Dempsey, White, Russell, Van der Merwe, Tuipulotu, Jones, Steyn y Kinghorn. También jugaron Ashman, Hepburn, Millar-Mills, Skinner, Christie, Horne, Healy y Redpath.
Marcador: 3 ensayos , Van der Merwe (20', 29', 45'), 3 transformaciones Russell (21', 30', 46') y 3 golpes de castigo Russell (35', 56' y 65').
INGLATERRA (13+8). Genge, George, Cole, Itoje, Chessum, Roots, Underhill, Earl, Care, Ford, Daly, Lawrence, Slade, Freeman y Furbank. También jugaron Dan, Marler, Stuart, Martin, Cunningham-South, Spencer, Smith y Feyi-Waboso.
Marcador: 2 ensayos, Furbank (5') y Feyi-Waboso (66'), una transformación Ford (6'), 2 golpes de castigo Ford (14' y 49') y un drop Ford (36').
Árbitro: Andrew Brace (Irlanda). Amarilla al escocés Van der Merwe en el 78'.
Para el domingo 25 quedaba por disputar el
Francia 13 Italia 13. Esta vez, rotando estadios nacionales por obras en el Stade de France parisino, le tocaba el turno al Pierre Mauroy de Lille. Francia recibía a una muy asequible Italia, que había perdido sus dos partidos anteriores y en último lugar de la tabla. Y lo impredecible, lo que nos arrastra a presenciar un espectáculo deportivo, ocurrió este domingo. El Gallo salía intentando ofrecer espectáculo desde el inicio a los aficionados de Lille. En busca de balones rápidos en las abiertas y mucha continuidad tras placaje para conseguir ensayar cuanto antes. Dos premisas que se cumplieron en el que sería su único ensayo del partido, de Ollivon. A partir de ahí los locales empezaron a malograr visitas a la 22 italiana con errores propios. Aguantaron mientras la Azzurra dejaba hacer, pero cuando los transalpinos entendieron que la virtud está en la paciencia la cosa se les torció. Aprovechando el golpe de castigo que terminó con la expulsión de Danty, Garbisi estrechó el margen (10-3 al descanso).
En la reanudación el pie de Ramos colocaba otra vez diez de ventaja para Francia pero Garbisi respondía en el ecuador del segundo acto (13-8). Al final la fruta caería de madura en un drive en el que los italianos encararon el abierto, donde a Francia ya no le cuadraban los números entre la expulsión y el cansancio, y Capuozzo encontró el banderín (13-13). Cuando parecía que estaba todo el pescado vendido, los locales se dispararon en el pie con un retenido a tiempo cumplido. Cuando corría el minuto 81, uno más del reglamentario ya, Garbisi se cuadraba para pasar entre palos una patada, que de acertar, daría a Italia su primera victoria en territorio francés en 24 años de participaciones en el torneo. Garbisi se recreó en su rutina, el balón resbaló del tee, el reloj de pateo se le echó encima, corrió atropelladamente para golpear y haciéndolo de forma poca ortodoxa, en una parábola casi a cámara lenta, el balón estrellaba en uno de los palos de la H, desviándose hacia afuera.
Terminaba así en empate a 13 un partido que dejó dos lecciones, ambas ajenas a la expulsión de Danty al final de la primera parte, que tuvo al Gallo con 14 durante toda la segunda mitad. Una, que esta Italia sí tiene justificación en el Seis Naciones. Rozando la sorpresa ante Inglaterra en la primera jornada, encajaba con dignidad el correctivo que se le presuponía ante Irlanda y por un capricho del destino no tumba a un equipo que hace meses estaba entre los principales candidatos a ganar el Mundial. De haberlo conseguido no habría sido por esa superioridad numérica, que también. Más bien por la bravura con la que se empleó en el placaje ante la pléyade de ball carriers que disfruta Francia, y por la alegría con la que se lanzan al abierto ahora los hombres de Gonzalo Quesada, que tienen materia prima para descoser líneas en los Garbisi, Menoncello, Capuozzo o Ioane. Sus cachorros marcaron el camino el viernes con la victoria en este mismo partido del torneo sub-20 y los mayores lo recorrieron, solo que ellos murieron en la meta. La otra es que la importancia de Dupont y Ntamack en el esquema francés se está revelando mayor incluso de lo que ya se sabía. Galthié puede ser cabezón en su apuesta, pero no estúpido, y a los 50 minutos de partido retiraba del 9 a Lucu. Un golpe había dejado antes del descanso fuera de juego a Jalibert, que seguramente no habría durado mucho más porque su primera mitad fue un desastre que para nada entronca con lo que se vio de él en el Mundial, un apertura capaz de disputarle la titularidad a Ntamack.
FRANCIA (10+3). Baille, Mauvaka, Atonio, Woki, Tuilagi, Boudehent, Ollivon, Cros, Lucu, Jalibert, Lebel, Danty, Fickou, Penaud, Ramos. También jugaban Marchand, Taofifenua, Roumat, Abadie, Le Garrec y Moefana.
Marcador: 1 ensayo Ollivon (6'), 1 transformación Ramos (7') y 2 golpes de castigo Ramos (13' y 44').
ITALIA (3+10): Fischetti, Nicotera, Zilocchi, N. Cannone, Ruzza, Favretto, Lamaro, Vintcent, Page-Relo, Garbisi, Ioane, Mori, Brex, Menoncello y Capuozzo. También jugaban Lucchesi, Spagnolo, Ferrari, Canali, Zambonin, Zuliani, Varney y Marin.
Marcador: 1 ensayo Capuozzo (69'), 1 transformación Garbisi (70') y 2 golpes de castigo Page-Relo (40') y Garbisi (60').
Ahora toca nueva jornada de descanso reanudándose la competición en dos fines de semana para enfilar con la cuarta jornada, el 9 y 10 de Marzo, el tramo final de competición. Los partidos programados son Italia & Escocia e Inglaterra & Irlanda el sábado 9, quedando para el domingo 10 el Gales & Francia.
No comments:
Post a Comment