La edición número 77 de la ronda española, se disputada desde el viernes 19 de agosto al domingo 11 de septiembre. Recuperando el recorrido de la fallida 2020 del covid, partía de Utrech, recorriendo las tres primeras etapas en territorio neerlandés volviendo a finalizar en Madrid tras el final compostelano de la edición anterior. En total 3.281 km de recorrido, de los que 392 eran en territorio neerlandés y ya en España el resto, comenzando por la cornisa cantábrica, luego sur peninsular y finalizando con unas últimas etapas centrales.
Montañosa, como es costumbre en la ronda española, de las 21 etapas siete eran de ese tipo, en otras cuatro había determinantes dificultades montañosas, ocho etapas eran llanas (aunque dos terminaban en alto) y había dos CR, una individual y otra por equipos, el primer y último día de competición, con 3 días de descanso entre medias.
Manteniendo el mismo formato de bonificación, que premia con 10, 6 y 4 segundos a los tres primeros de cada etapa, respectivamente y con 3, 2 y 1 segundos a los tres primeros corredores en pasar por algunos sprints intermedios, además de algunos puertos de montaña en esta edición. Los primeros se ubicarán en las etapas 2, 3, 7, 11, 12, 13, 16, 17, 19 y 21. Los segundos serán el Pº de la Herrera, en la cuarta etapa; el Alto del Vivero, en la quinta, Collado de Brenes en la sexta, Pº de Tenebreo en la octava; La Campa, en la novena; el Pº de los Villares, en la 14ª; el Alto del Purche, en la 15ª; el Alto del Piornal, en la 18ª; y el Pº de la Morcuera, en la 20ª.
Nuevos alicientes son las nueve llegadas en alto, cinco de ellas inéditas, al monasterio de Tentundía y el Alto del Piornal entre ellas
Los 23 equipos presentes, 18 UCI World Tour más los dos mejores ProTeams (Alpecin-Fenix y Arkea Samsic, y los invitados españoles Kern Farma, Burgos BH y Euskaltel Euskadi), conformaban un pelotón de 184 ciclistas con ausencias notables en sus filas.
La lista de candidatos al título la encabezaba el actual campeón, el esloveno Primoz Roglic (Jumbo), con el belga Remco Evenepoel como principales espadas junto a corredores como el ecuatoriano Richard Carapaz (INEOS), el británico Simon Yates (Bike Exchange), el colombiano Miguel Angel López (Astana) o los españoles Enric Mas (Movistar) y Mikel Landa (Bahrain), que podrían dar la sorpresa.
PRIMERA SEMANA.
Arrancaba la carrera el viernes 19 con la
primera etapa, una
CR por equipos de 23,3 km en Utrech con salida y llegada en la parte antigua, y los 23 equipos partiendo cada 5 minutos comenzando con el Burgos BH, con Movistar partiendo penúltimo y finalizando con Jumbo. Con el piso húmedo en algunos tramos o directamente ligera lluvia en otros, Israel fue el primero en rebajar los 26' e Ineos en bajar de los 25', 24'53"80 con cuatro equipos quedando todavía por partir. Tan solo Jumbo conseguía batir ese crono y con 24'40"25 se imponían en esta primera etapa con el tercer escalón del podio para Quick Step, un segundo más lentos que Ineos. Movistar finalizaba décimo a 43". Primer maillot de líder para Robert Gelhsink.
La segunda etapa, totalmente llana de 175 km entre 'S Hertogenbosch y Utrech era la primera oportunidad de triunfo para los velocistas. Fuga inicial de cinco corredores, J. Van den Berg, J. Bol, P. Miquel, T. Guernalec y Xabi Azparren y que llegaron a tener 5' de ventaja con el beneplácito del pelotón y que fue abortada a 50 km para el final. Con otra intentona en solitario de LA. Maté que duró 25 km, el pelotón llegaba en grupo a Utrech imponiéndose en el sprint final el irlandés S. Bennett, con el danés M. Pedersen, segundo y el alemán T. Merlier completando el podio. Ahora es líder el neerlandés Mike Teunissen, siendo el primer español Carlos Rodríguez del Ineos, 10º a 13".
El domingo, la 3ª etapa, llana de 193 km con salida y llegada en Breda y un recorrido circular, repetía el guion de la anterior con fuga inicial y llegada masiva al sprint. En la fuga de siete corredores, repetían J. Van den Berg y P. Miquel con T. de Gendt, J. Bakelants, J. Herrada, A. Okamika y M. Iturria. Se imponía nuevamente Bennett remontando un sprint muy apretado. Segundo finalizaba otra vez M. Pedersen y tercero era el británico D. McLay. Nuevo cambio de líder, esta vez en la figura del italiano Edoardo Affini y sin cambios en el resto de la clasificación.
El lunes 22 la carrera llegaba ya a territorio español, a Vitoria concretamente, donde se producía la primera jornada de descanso.
Al día siguiente, la 4ª etapa de media montaña y 152 km, comenzaba en Vitoria y finalizaba con una fuerte rampa en Laguardia. Al poco de empezar, ya se había consolidado una escapada de seis corredores con A. Lutsenko, J. Shaw, A. De Marchi, J. Drizners, A. Okamika y J. Bou. Era el Jumbo, con Affini vistiendo La Roja, el equipo que más trabajaba para controlar a la escapada y Lutsenko, Shaw y De Marchi, los tres escapados que más resistían, finalmente eran neutralizados a 34 km de meta. Así el pelotón afrontaba sin fugados el Puerto de Herrera (3ª), ligeramente reducido tras una etapa rompepiernas. En las rampas finales del puerto, J. Alaphilippe arrancaba con fuerza y Roglic respondía en primera persona, coronando en cabeza el puerto y sumando 3" de bonificación. Misma estrategia que usaba luego en la resolución de la etapa, siendo el esloveno el más rápido sin discusión, batiendo sobre la línea a M. Pedersen, que se quedaba a las puertas de la victoria por tercera vez consecutiva y a un buen Enric Mas, todos con el mismo tiempo. Con la victoria (10ª en La Vuelta), Roglic se coloca líder con 13" de ventaja sobre su compañero S. Kuss y 26" sobre los Ineos Hayter, Syvakov y Geoghegan. Carlos Rodríguez es 8º a 33".
El miércoles 18, la 5ª etapa era también de media montaña y discurría entre Irún y Bilbao, con 187 km de recorrido y cinco subidas en alto, las dos últimas, el Alto del Vivero repetido, la última vez a 12 km de meta. El primer tercio de etapa fue una batalla constante, con una primera hora a más de 50 km/h de media y sin consolidarse ninguna escapada. No era hasta el km 70, a los pies del Puerto de Gontzagarigana (3ª) y con los siguientes integrantes V. Pronskiy, F. Wright, J. Caicedo, R. Molard, J. Stewart, J. Johansen, A. De Marchi, D. Impey, K. Malecki, G. Mühlberger, F. Masnada, L. Craddock, N. Arndt, V. Langellotti, R. Adrià, I. Azurmendi y A. Delaplace. A mitad de la ascensión Soler saltaba y remontaba los 2' de desventaja con la fuga, para enlazar con la cabeza de carrera en el Balcón de Bizkaia (3ª), km 102 de etapa. Era el norteamericano L. Craddock el más combativo en la primera ascensión al Alto del Vivero (2ª), un esfuerzo que le servía para seleccionar la fuga camino de Bilbao, a menos de 30 km para la resolución de la etapa. Camino de la segunda ascensión al Vivero, era J. Stewart el que saltaba en solitario, pero después de otras tentativas en las rampas del puerto, era el movimiento de Marc Soler el definitivo, para alcanzar y sobrepasar al joven británico y después, en un descenso espectacular marcharse en solitario hacia la línea de meta. A pesar de los intentos en el grupo perseguidor y de mantener una ventaja de solamente una decena de segundos, el español resistía pudiendo celebrar el triunfo en solitario en la Gran Vía de Bilbao. A 4"entraba el resto de la fuga comandado por el sudafricano D. Impey, el británico F. Wrigth y con Rudy Molard en cuarta posición, heredando el primer puesto de la general y donde Roglic desciende a la 5ª plaza a 4'09, con Kuss, Sivakov, Geoghegan, Evenepoel y Carapaz completando el topten. Carlos Rodríguez es 11º a 4'42.
La sexta, transitaba entre Bilbao y el Pico Jano en San Miguel de Aguayo con 181 km de recorrido con dos puertos previos. Primera etapa de montaña, era esperada por los favoritos para posicionarse en la general. La escapada del día se formaba en el km 10, con R. Fernández , M. Padun, J. Bakelants, N. Oliveira, F. Masnada, K. Groves, M. Brenner, D. Cataldo, X. Meurisse y X. Azparren. Llegaban a tener cerca de 6' de ventaja, lo cual le daba el liderato virtual al belga Bakelants, pero el empuje del Quick-Step de Evenepoel les dejaba sin opciones en la última ascensión. Era Alaphilippe el que seleccionaba la carrera tanto en la subida a la Collada de Brenes, a 35 km de meta, como en su descenso, endureciendo la aproximación al ascenso al Pico Jano. El puerto final lo empezaba liderando el ucraniano M. Padun con un minuto de ventaja después de exhibirse con un impresionante ascenso al Collado de Brenes, donde dejaba atrás a sus compañeros de escapada.
Por detrás entre los favoritos, S. Yates hacía el primer movimiento, pero era el australiano Jay Vine el que saltaba definitivamente a los pies del inédito puerto cántabro, neutralizando a Padun y llevándose con él a Evenepoel y a Más, los grandes beneficiados del tirón del australiano. Vine resistía el empuje de Evenepoel en el último tramo y se imponía en la niebla de meta con 15" de ventaja sobre el ciclista belga. Tiempo suficiente para que Remco Evenepoel, se convierta en el sexto líder de La Vuelta en seis días de competición. Enric Mas entraba 3º un segundo por detrás, con Juan Ayuso 4º a 55" y Carlos Rodríguez 9º a 1'37. Por lo que en la general, Más es también tercero a 28", 7" por detrás del segundo, Molard, que ha sabido sufrir para mantener la plaza; Ayuso es 5º a 1'12 y Rodríguez es 8º a 1'34. Roglic que cruzaba la meta con 1’37” de retraso encabezando el grupo perseguidor sigue figurando en 4ª posición.
La 7ª etapa, discurría entre Camargo en Cantabria y la inédita llegada a Cistierna en León, con 190 km de recorrido de media montaña y la subida a San Glorio, a 65 km de la meta. Con un perfil adecuado para que una escapada llegara con opciones de triunfo a la línea de meta, se consolidaba un grupo de seis hombres con S. Battistella, F. Wright, J. Herrada, O. Goldstein, H. Sweeny y J. Janssens, y casualidad, sin presencia del Euskaltel-Euskadi ni del Burgos-BH. Su ventaja apenas superaba los 4' por el control del pelotón, pero lograban coronar el puerto con 3' los cinco ciclistas que le quedaban a la fuga después de haber cedido el israelí Goldstein en las rampas más duras. La aceleración del pelotón no era suficiente para echar abajo a los fugados, dado el buen entendimiento entre ellos y la notoria debilidad de los equipos de los velocistas en el pelotón, que cada vez tenía a menos corredores trabajando en cabeza. De esta forma, los aventureros han podido jugarse con medio minuto de ventaja el triunfo de etapa, sabiendo el español Herrada rematar un sprint reducido, imponiéndose al italiano Battistella y al británico Wright. Con los favoritos reservándose para las siguientes y duras jornadas, la clasificación general no sufría cambios.
El sábado, la octava etapa, en Asturias, montañosa de 153 km y con 5 puertos, enlazaba Pola de Laviana con el Collado Fancualla, en su segundo final en alto. Con el Puerto de la Collonada nada más empezar se organizaba la fuga de nueve buenos escaladores, con Lutsenko, Vine, Pinot, Reichenbach, Taramaae, Hamilton, Pedersen, Armirail y los españoles Landa y Soler que han llegado a la última subida con 3' de diferencia lo que les ha permitido culminar la fuga. En el Collado y a 5 km de meta, el novato Vine ha vuelto a imponer su superioridad, demarrando y ganando con autoridad su segunda etapa. A 43"entraban, Soler segundo y Taramaae, tercero, con el pelotón entrando a 1'20 y Evenepoel manteniendo la roja al aguantar los ataques de Roglic y con Mas ascendiendo a la segunda posición, Rodríguez a la 4ª y Ayuso a la 6ª.
El domingo se completaba la primera semana de carrera en territorio español con la montañosa novena etapa (171 km) entre Villaviciosa y Las Praeres, con dos puertos de 3ª, uno de 2ª y otros dos de 1ª, uno de ellos la meta. Se necesitaban prácticamente 50 km de batalla para que se consolidara la fuga del día, con S. Battistella, E. Zambanini, D. van Baarle, L. Meintjes, F. Conca, T. Arensman, J. Janssens, R. Stannard, JM. Díaz y S. Guglielmi, llegando al pie del primer puerto del día, el Alto del Torno, con una ventaja de 2'. En ese momento Arensman decidía descolgarse, consiguiendo llevar una relativa paz al pelotón al que esperaba una dura jornada. Y como ocurría en la jornada anterior, los 5' de ventaja que los nueve fugados mantenían en la aproximación al puerto final ya hacían presagiar que un día más la escapada llegaría a término, a pesar del trabajo del Quick-Step en cabeza del pelotón, pero al que no ayudaba ningún otro equipo. Todo se iba a decidir en las temidas rampas de Les Praeres, la explosiva subida asturiana situada en Nava, y a la que Battistella y Janssens llegaban por delante con 30" sobre el resto de la fuga. A 3 km de la cima el sudafricano Meintjes les alcanzaba y dejando patente su condición de escalador, les sobrepasaba con facilidad llegando a meta en solitario con más de un minuto sobre sus rivales. Segundo terminaba Battistella y tercero Zambanini. Por detrás en la lucha por la general, después del endurecimiento del ritmo con Alaphilippe como último relevo clave, Evenepoel no esperaba a nadie e imponía su ritmo machacón para ir dejando atrás a todos sus rivales, entrando cuarto a 1'34. Remontando a corredores de la escapada, en su persecución, los más fuertes eran los españoles Ayuso 6º, Mas 8º y Rodríguez 9º, que hoy han vuelto a aventajar en unos segundos al esloveno Roglic. Con la renta conseguida en meta, Evenepoel obtiene más de un minuto de margen sobre sus más cercanos perseguidores en la general.
Comenzaba la SEGUNDA SEMANA,
después del lunes de descanso en Alicante con
la
CRI de la 10ª etapa, 31 km llanos entre Elche y Alicante y que podía sentenciar media carrera.
R. Cavagna con un crono de 34'18 se colocaba desde muy temprano como líder virtual aguantando la silla caliente durante mucho tiempo. Hasta la llegada de los últimos participantes y con C. Rodríguez como máxima amenaza 34'40, era Roglic quién le lograba superar, por 12" sabiendo que por detrás el ganador sería R. Evanepoel que iba mejorando todos los tiempos intermedios y se imponía con un tiempo de 33'18. Cambios en la general, con el líder Evenepoel aumentando su ventaja, ahora de 2'41 sobre Roglic, 3'03 sobre E. Más y 3'55 sobre C. Rodríguez. J. Ayuso es 6º a 4'53.
La undécima, transitaba entre Alhama de Murcia y Cabo de Gata. Llana de 191 km marcada en el calendario para los sprinters. El guion de la etapa se veía claro desde los primeros compases: fuga consentida, en esta ocasión de el neerlandés J. Bol, el joven checo V. Repa y el valenciano J. Bou. Dejando la ventaja máxima del grupo cabecero en cerca de cuatro minutos, a 52 km de meta, aprovechando un repecho y cuando estaban a punto de ser absorbidos, Bol lanzaba un ataque que le permitía resistir hasta 26 km de meta. Los grandes equipos de La Vuelta han rodado compactos luchando por la mejor posición en un final en el que siempre estaba presente la amenaza del viento y los cortes. En el sprint se imponía K. Groves, que ha hecho bueno el trabajo de su equipo, por delante de D. van Poppel y de T. Merlier. La noticia del día ha sido el abandono de J. Alaphilippe, que sufría una importante caída a 63 km de meta. La general sin cambios.
En la etapa 12ª del primero de septiembre, los ciclistas tenían por delante una etapa llana de 193 km que partiendo de Salobreña, finalizaba en el puerto de 1ª de Peñas Blancas (1ª) en Estepona. Tras una hora de batalla (47,3 km/h de media) se consolidaba la escapada del día, que finalmente quedaba formada por 32 ciclistas entre los que destacaban R. Carapaz, M. Soler, J. Vine o W. Kelderman (el mejor situado en la general, 21º a 14’04” del pelotón). La potente y numerosa escapada hacía camino hasta llegar al pie del puerto de Peñas Blancas con cerca de 11 minutos de ventaja. En el pelotón, las alarmas saltaban solamente con la caída del líder a unos 50 km de meta, sin mayores consecuencias. En las primeras rampas de Peñas Blancas, Bora pensando en las opciones de Kelderman y al ritmo de M. Fabbro, seleccionaba la fuga. Sin embargo, ninguno de los ocho de delante podía reaccionar al ataque de R. Carapaz a 2 km de la cima malagueña, ganando su primera etapa de una Vuelta, 9" por delante de Kelderman y 24" de Soler. En el grupo, Jumbo asumía el mando en el puerto final pero finalmente el que saltaba era E. Mas a unos 6 km de meta y al que Evenepoel respondía imperialmente, controlando todos sus movimientos durante la subida y encabezando nuevamente el grupo de aspirantes en meta, entrando a 7'39 de la cabeza. En la general Carapaz asciende al 16º puesto a 11'37".
La etapa 13ª, entre Ronda y Montilla de 168 km, llana y pensada para los sprinters, propiciaba una fuga inicial. Con la noticia de varios abandonos por Covid, se producía nada más salir y de tres corredores, el neerlandés J. VD Berg y los españoles A. Okamika y J. Bou. Ante la permisividad del pelotón y con una ventaja que siempre oscilaba entre los 2 y 3 min, a 10 km de meta eran atrapados por el pelotón, dejando paso a la esperada llegada masiva, donde en un final con pendiente ascendiente, el danés M. Pedersen se imponía al alemán P. Ackermann, que había lanzado el sprint y era superado, también, por, el francés B. Coquard, que terminaba segundo. La general apenas sufre cambios.
La
14ª etapa del sábado 3 era una etapa montañosa de 160 km que saliendo de Montoro finalizaba en la Sierra de La Pandora con el paso de dos cimas previas. Propicia para las fugas, se necesitaban prácticamente 80 km de etapa para formar la escapada del día. Eran diez los ciclistas con C. Champoussin, A. Lutsenko, LL. Sánchez, B. Armirail, R. Carapaz, F. Conca, M. Brenner, K. Elissonde, M. Pedersen y R. García. Una vez ha llegado la calma Quick-Step se encargaba de controlar el pelotón, con una diferencia que nunca ha superado los 4'. En la ascensión al Puerto de Los Villares (2ª categoría), a solamente 12 km para la línea de meta, LL. Sánchez se marchaba coronando en solitario y llegando con una veintena de segundos de ventaja sobre, Carapaz, Champoussin y Conca, a las primeras rampas de la Sierra de La Pandera. El fuerte empuje del Jumbo en el pelotón acercaba a los escapados a menos de 2' y parecía alejar las opciones de victoria al grupo de cabeza, pero Carapaz demostrando su buen estado de forma, asumía la cabeza a poco más de 3 km para la línea de meta y finalizaba en solitario con solamente 8" sobre MÁ. López y P. Roglic, los dos mejores entre los favoritos en el día de hoy. Y es que el dorsal#1 se lanzaba al ataque a 4 km de la meta del puerto jienense, en un movimiento que no podía contrarrestar el líder de la carrera Evenepoel y solamente lograban responder López y Mas. El español con problemas, en los últimos metros de ascensión perdía contacto con el grupo. Por su lado, Evenepoel ha sabido sufrir cediendo en meta solamente 48" con López y Roglic. Así pues, Evenepoel sigue al frente de la clasificación general con 1'49 sobre Roglic y 2'43 sobre Mas, habiendo minimizado las pérdidas en su primer día de debilidad de los ocho de liderato. 4º es Rodríguez a 3'46 y 5º Ayuso a 4'53.

La etapa 15ª, también montañosa transitaba entre Navalmoral y Sierra Nevada con 153 km de recorrido y con 3 cotas puntuables, la última la meta de Monachil, constituía la etapa reina de esta Vuelta 2022. En el inicio de una etapa que se preveía decisiva, se han vivido más de 30 kilómetros de intensa batalla hasta que se ha consolidado un grupo de 29 corredores escapados, con ciclistas que ya sabían lo que es ganar etapa como Carapaz, Soler, Vine y Meintje y nombres importantes como Hindley o Masnada entre otros. Pero en esta ocasión, el Quick-Step ha tenido como aliado en la persecución del grupo de fuga a Ag2r, para defender el 10º puesto en la general de Ben O’Connor. La verdadera dureza del día empezaba en el Alto del Purche, donde el americano Craddock, que había atacado en solitario unos kilómetros atrás, y el líder de la montaña Vine han coronaban en cabeza, mientras que en el grupo de favoritos Ag2r y Jumbo-Visma seguían imponiendo un fuerte ritmo. Una vez se completara el descenso, quedaba por delante el coloso de Sierra Nevada (esta vez por Hazallanas, con más de 22 kilómetros de ascensión)que Soler ha empezado en cabeza de carrera después de haber atacado a pie del puerto, consiguiendo una ventaja notable en la primera mitad de la ascensión. Sin embargo, el joven Arensman, que además era el mejor situado en la clasificación general, ha sabido hacer una subida de menos a más y superaba al catalán a 6,5 kilómetros de meta para lanzarse en solitario hacia la victoria de etapa.
Por detrás en el grupo de favoritos, ya muy seleccionado con la ofensiva del Jumbo, MA. López rompía las hostilidades a 11 km de la llegada, seguido por Mas. Ayudados por el compañero del colombiano, D. De La Cruz, que se dejaba caer del grupo de escapados, han ido remontando corredores en fuga hasta llegar a meta en 2ª y 3ª posición, a 1'23 del neerlandés, y arañando 36" al líder de la general. Evenepoel, que ha realizado toda la subida junto a Roglic y O’Connor, acababa cediendo finalmente, pero a menos de 2 km para meta, y sabiendo sufrir un día más, mantenía el líderato antes de la semana final, con 1'34 sobre el mismo Roglic y 2'01” sobre Mas. Ayuso se mantiene 4º a 4'49 y Rodríguez 5º a 5'16 pero acosado por MA. López a 8".
TERCERA SEMANA.
Después del segundo lunes de descanso, esta vez en Jerez de la Frontera, se retomaba la competición el martes 6 de septiembre
con la etapa 16ª, una jornada llana que discurría por tierras andaluzas entre Sanlúcar de Barrameda y Tomares. De 189 km, comenzó con la preceptiva escapada de inicio, en esta ocasión con los españoles A. Okamika y L.A. Maté ante la permisividad del pelotón. Después del día de descanso y con cuatro días complicados por delante, el pelotón ha vivido hoy un día de relativa calma, a la espera de un final que se prometía explosivo en Tomares. Trek y Cofidis tomaban la responsabilidad en el pelotón controlando a los escapados, dejándoles un margen máximo de 4'.
A 2 km de meta, en un repecho, Roglic ha desatado un ataque que ha resultado lo único emocionante de la lenta etapa. Con Pedersen, Ackermann, Van Poppel y Wright a su rueda han conseguido unos metros, suficientes para llegar a la recta de meta por delante, mientras por detrás Evenepoel sufría un problema mecánico. Roglic, lanzando el sprint, sufría una caída a 75 m de la línea al hacer el afilador con Wright. En meta se imponía Pedersen repitiendo triunfo, secundado por Ackermann y Van Poppel. Al esloveno le han otorgado el mismo tiempo que al ganador de etapa, arañando así 8" más que a Evenepoel, a quien se le adjudicaba el tiempo del pelotón. Sin apenas cambios en la general.
La decimoséptima era una de las etapas decisivas para los favoritos. 162 km llanos comenzando en Aracena y con la meta en alto del Monasterio de Tentudía (2ª C). La pésima noticia de la mañana era el abandono de Primoz Roglic que no tomaba la salida de la etapa como consecuencia de la caída el día anterior en Tomares. Después de una salida muy batallada, a 48 km/h de velocidad media en la primera hora la esperada escapada esta vez estaba formada por ciclistas de casi todos los equipos. Hoy, de nuevo eran muchos los equipos interesados en formar parte de la escapada del día, que han acabado integrando C. Champussin, B. Jungels G. Mäder, F. Wright, S. Guglielmi, R. Urán, Q. Pacher, A. De Marchi L. Craddock, K. Elissonde, E. Gesbert y los españoles J. Herrada y M. Soler. Sin ningún interés en neutralizar a los trece fugitivos, que han llegado a tener una ventaja de 7', la escapada llegaba a término. Era Craddock el que lo intentaba antes de la subida final al Monasterio de Tentudía, cogiendo una ventaja de 20" que ha mantenido hasta el la pancarta de último km, cuando un reducido grupo de perseguidores llegaba a su altura. Luego era Herrada el que atacaba buscando su segunda victoria pero era finalmente Rigoberto Urán el que se llevaba el premio en un final explosivo por delante del francés Quentin Pacher y del mismo Herrada. En el grupo de favoritos, después de una rápida aproximación al puerto por parte de Ineos y Movistar, era Mas quien probaba suerte en la segunda mitad del puerto, pero el líder no le daba ni un metro de ventaja, y los dos cruzaban a la par la línea de meta. Apenas cambios en la general.
El jueves con la 18ª etapa, la carrera consumía otro día decisivo. Eran 192 km montañosos que partiendo de Trujillo terminaban en el inédito Alto del Piornal, que se ascendía dos veces. Nuevamente una primera hora de batalla a 50 km/h, para que se consolidara una fuga de 42 ciclistas con Carapaz, Geoghegan, Soler, Pinot, Higuita o Craddock, entre ellos. Pero la noticia era una importante caída que ha obligado a abandonar a Jay Vine y afectaba de forma clara a Carlos Rodríguez. Al pie de la primera ascensión del Piornal, J. Almeida, burlaba la vigilancia del pelotón junto a su compañero B. McNulty y otros cuatro corredores. El portugués, 6º en la general, lograba una ventaja de 1', provocando la reacción del Astana en el grupo en los últimos kilómetros del ascenso (1ª cat, a 40 km de meta) y MA. López con su ataque, hacía la selección de apenas una decena de unidades, coronando en cabeza. Del grupo cabecero, que comenzaba con menos de 2' de ventaja el ascenso definitivo a Piornal, aguantaban Carapaz, Carthy, Pinot, Higuita, E. Gesbert y R. Gesink, y con el último, demarrando en solitario hacia meta. Mientras, en el grupo de favoritos empezaban pronto las hostilidades, con Mas atacando y Evenepoel respondiendo en persona. Finalmente, Mas con Evenepoel a rueda, protagonizaba el definitivo ataque, ya en el último kilómetro, y que neutralizaba a Gesink a escasos 20 m de meta. En un sprint a tres, Evenepoel era el más rápido, con Mas segundo y Gesink tercero. El belga consolida su ventaja en la general, que ahora comanda con 2'07”sobre el balear y 5'14 sobre Ayuso. Rodríguez cede su puesto a MA. López, que ahora es 4º.
El viernes la ronda se trasladaba a Castilla para disputar la 19ª etapa. Una circular, corta de 138 km, con partida y llegaba en Talavera de la Reina, ascendiendo dos veces el Puerto de Piélago. Jornada de media montaña, con el último puerto a 40 km de meta, la fuga del día, la conformaban J. Caicedo, B. McNulty y otra vez A. Okamika. El Trek no dejaba que prosperara más allá de los tres minutos y en meta se imponía por segunda vez esta ronda, su sprinter M. Pedersen sobre el británico F. Wright y el belga G. Vermeesch. Sin cambios en la general, quedaba la resolución de la carrera para la siguiente etapa, la reina, la madrileña de los puertos.
La vigésima etapa, penúltima de la vuelta discurría por la sierra madrileña
entre Moralzarzal y el Puerto de Navacerrada. De 181 km y muy exigente, con 5 ascensiones. Como era de esperar, la etapa comenzaba muy nerviosa con ataques constantes en busca de la fuga. Se formaba una, en el primer ascenso al Puerto de Navacerrada (1ª C), con Marc Soler y Robert Stannard como ciclistas más notables. En su persecución, rodaba un segundo grupo de unos veinte ciclistas entre los que destacaban Carapaz y Meintjes, que como corredor mejor situado en la clasificación general, ponía en jaque la 10ª posición del australiano Jai Hindley, y por ello era el Bora el que tiraba del pelotón hasta las primeras rampas del Puerto de La Morcuera (1ª C). Penúltimo puerto del día, fue entonces cuando Movistar (que había situado a Valverde y Mühlberger en la cabeza de carrera), movía ficha comenzando su ofensiva contra Evenepoel. Después del fuerte ritmo impuesto por Nelson Oliveira y Carlos Verona, era Mas el que lanzaba su ataque a unos 4 km de la cima, al que sólo han podido responder Evenepoel, Ayuso, Arensman y O’Connor. Sin lograr conseguir grandes diferencias en la cima, se producía un nuevo reagrupamiento en el descenso. El guión se repetía en la ascensión final al Puerto de Cotos, que afrontaba por delante el grupo de Carapaz, Higuita y Meintjes. Mas y López lanzaban su ataque en el puerto final, en el caso del colombiano con la ambición de asaltar la tercera plaza del podio de Juan Ayuso. Sin embargo, Joao Almeida se encargaba de acelerar al grupo en favor de su jovencísimo compañero, que encabezaba el grupo de favoritos al paso del puerto, seguido de Hindley, Mas, Evenepoel, Meintjes, López y Almeida. Por delante, Carapaz atacaba en la misma cima de Cotos y se lanzaba en solitario a recorrer los 8 km restantes hasta meta y a su tercera victoria de etapa, resistiendo de forma espectacular el empuje de los favoritos e imponiéndose con solamente 8" de diferencia sobre Arensman, que había saltado del grupo y que entraba en meta 5" después, con Ayuso a la cabeza. Pocos cambios en la general, tan solo Almeida, que subía al top 5 en detrimento de Carlos Rodríguez que cedía más de un minuto, dolorido por su caída en la etapa 18 y bajaba a la 7ª plaza, superado también por Arensman.
Finalizaba la edición con una tradicional y última
21ª etapa que sirviera como homenaje al vencedor y como premio añadido para los sprinters. Entre Las Rozas y Madrid, el corto paseo de 96 km, tras tres semanas de carrera, terminaba en un sprint con final diferente, pues un habitual lanzador como Sebastián Molano se imponía en meta a M. Pedersen y a su compañero P. Ackerman.
Previamente por La Castellana, y como gran homenaje previo de despedida a Alejandro Valverde, todos los portadores de maillots posaban juntos, para entrar sin incidentes en meta incluido el rojo de Evenepoel que consigue así su primera grande.
Remco Evenepoel se corona como vencedor de su primera Vuelta, acompañándole en el podio Enric Mas, segundo clasificado por tercera vez y con Juan Ayuso tercero y corredor más joven en subir al podio final en la historia de La Vuelta, todavía con 19 años.
El resto de las clasificaciones las han liderado
Maillot blanco de los jóvenes: también para el belga Evenepoel.
Maillot verde de los puntos, para el danés Mads Pedersen.
Maillot de lunares de la montaña, para el el ecuatoriano Richard Carapaz.
El premio a la combatividad, para el español Marc Soler.
La Clasificación por equipos ha sido para el UAE Emirates.
Los nombres de la Vuelta 2022 Remco Evenepoel: Indiscutible ganador que cimentó su éxito con dominio en las etapas de montaña del norte, especialmente en Pico Jano y La Fancuaya, donde superó a sus rivales, y en la crono de Alicante, donde ya obtuvo una diferencia cómoda para defender en la tercera semana, su triunfo no ofrece dudas. Fue el mejor en todos los terrenos y se supo defender siempre, con la madurez de un incipiente campeón, incluso sin contar en ocasiones con el apoyo de su equipo. Desde 1977 no ganaba un belga la Vuelta (Freddy Maertens), ni una grande por etapas. El último fue Johan De Muynck en 1978 como ganador del Giro de Italia.
Primoz Roglic: el vigente campeón fue el único que puso contra las cuerdas a Evenepoel hasta su caída y abandono en la etapa 16ª, cuando figuraba en 2ª posición y a 1'26 de diferencia. Ganaba la 4ª etapa y se ponía líder esa jornada, terminando 3º en la 14ª. ¿Qué hubiera pasado de no tener que abandonar?
Richard Carapaz: El ecuatoriano, descolgado de La Roja desde la 6ª etapa, se ha marcado una gran vuelta ganando tres etapas, terminando 14º en la general y rey de la montaña.
Mads Pedersen: Al Campeón del Mundo danés le ha faltado un pelo de suerte para haber completado la carrera de su vida. Rey del sprint, son suyos tres etapas y cuatro segundos además del Maillot verde de una Vuelta a España que siempre recordará.
Jay Vine: Dos victorias de etapa, las dos en montaña y las dos en solitario, demuestran sus dotes de escalador. Vuelta espectacular la del joven corredor australiano del Alpecin que se ha consolidado en el pelotón en esta su segunda edición de la ronda española. Muchos kilómetros en fuga, ganador y además buen currante.
Enric Mas: segundo en la general, ha estado siempre en la pomada aunque no haya conseguido culminar su actuación con una etapa. El mejor español sin duda, es el tercero en su palmarés. Superadas sus fobias, tiene que atreverse, tiene que creérselo para ganar.
Juan Ayuso: en su debut, tercer puesto para él, convirtiéndose con 19 años es el más joven ciclista en subir al podio de una grande en 118 años. El verdadero líder del UAE aprovechó todo el potencial de su equipo y la lío en carrera. Destacar su exhibición en la 20ª etapa. Su atrevimiento y ambición le hicieron estar siempre junto a los mejores. Tiene clase y mentalidad, y el ciclismo español tiene en él una perla a cuidar.
Sam Bennett: impresionante el irlandés, sobre todo al comienzo con dos victorias sobre el danés volador
Carlos Rodríguez, compitiendo entre los grandes vestido con su maillot de campeón de España. Su clase también es indiscutible y en esta Vuelta estuvo viviendo en el ´top 5´ hasta que una caída en El Piornal lo dejó maltrecho, hasta retroceder en Navacerrada a la séptima plaza.
Louis Meintjes: una victoria de etapa para el sudafricano y 11ª posición final, a punto de top ten. Muy combativo ha estado en casi todas las escaramuzas.
Marc Soler: gran animador, una etapa fue suya, además de un 2º y un 3º y aunque terminaba clasificado como 27º de la general, fue el corredor más combativo de la carrera.
Sin olvidar mencionar al resto de ganadores de etapa, como al australiano Kaden Groves, al colombiano Rigoberto Urán, al neerlandés Tymen Arensman o los españoles Jesús Herrada y Juan Sebastián Molano.
Es obligado nombrar los ciclistas que tuvieron que abandonar comenzando por Primoz Roglic, Michael Woods, Julian Alaphilippe, Simon Yates, Pavel Sivakov, Wout Poels, Esteban Chaves, Rein Taramae o Boy van Poppel entre los extranjeros y Jesús Herrada, Manuel Peñalver, Roger Adriá, Héctor Carretero o Pau Miquel, entre los españoles, y que deslucieron un tanto la carrera.
Mención especial para Valverde (13º y segundo de los Movistar), en su retirada como corredor profesional y para Chris Froome en un llamativo gesto de pundonor y enorme profesionalidad (114º). En cuanto a la actuación española se puede considerar muy buena, a falta de la guinda. Después de varias ediciones de sequía, en esta se han producido tres triunfos, dos segundos y siete terceros.
Tanto el Euskatel, como Caja Rural o Burgos BH estuvieron en multitud de fugas y dieron color a una carrera que les necesita.
Por fin disfrutamos de una Vuelta con más luces que sombras para los españoles, que permiten hacernos soñar en la siguiente edición.